La calidad del aire podría no ser una prioridad para todos los expatriados en este momento, pero eso podría cambiar pronto. Los expatriados y aquellos que consideran mudarse están volviéndose más conscientes de los problemas ambientales y ecológicos. Por supuesto, a nadie le gusta vivir en una ciudad con mala calidad del aire; simplemente, el problema necesita ser reconocido. Los contaminantes ocultos, como las partículas finas, degradan significativamente la calidad del aire urbano y plantean riesgos para la salud. Echemos un vistazo más de cerca a este problema.