Volver a casa tras una larga temporada en el extranjero puede ser una experiencia realmente gratificante y muy esperada. Sin embargo, también puede plantear varios retos distintos, desde el choque cultural inverso hasta incluso una nueva barrera lingüística. Veamos qué se puede hacer para facilitar la transición.
¿Qué es el choque cultural inverso?
El choque cultural inverso, también conocido como "choque de reincorporación", es el nombre que recibe el malestar psicológico y emocional que puedes experimentar cuando regresas a tu país de origen tras haber pasado un largo período viviendo en el extranjero.
A diferencia del choque cultural inicial al que puedes enfrentarte cuando intentas adaptarte a la vida en un nuevo país, el choque cultural inverso se produce cuando intentas reintegrarte en tu propia cultura. Y puede manifestarse de distintas maneras. El choque cultural inverso puede ir acompañado de sentimientos de ansiedad, desorientación y frustración y, si no lo tienes en cuenta, puede llevar incluso a la depresión. Por eso es importante reconocer desde el principio que estás experimentando un choque cultural.
He aquí algunos signos reveladores de que puedes estar sufriendo un choque cultural:
- Te sientes como un extraño en tu país de origen y parece que no puedes encajar.
- A menudo piensas en tu experiencia en el extranjero y echas de menos la cultura, la gente y el estilo de vida al que te habías acostumbrado allí.
- No puedes evitar comparar tu país de origen con tu destino de expatriación y sientes que tu hogar es, de alguna manera, deficiente.
- Te irritan ciertos aspectos de tu cultura de origen que antes te resultaban naturales.
- Tienes problemas para volver a conectar con amigos y familiares, ya que sus experiencias vitales ya no son las mismas y sus prioridades y formas de vida son diferentes.
- Puede resultarte difícil adaptarte a tu vida profesional y social.
- Empiezas a sentir que estás en desventaja debido a estas barreras culturales, sociales y, quizás, lingüísticas recién adquiridas.
- Por último, empiezas a cuestionar tu identidad y el lugar al que realmente perteneces.
- En general, el choque cultural inverso puede ir acompañado de toda una montaña rusa de emociones, que van desde el entusiasmo hasta la confusión, a medida que navegas por esta complicada transición.
¿Cómo readaptarte a tu país de origen después de muchos años en el extranjero?
Supongamos que te has dado cuenta de que sufres un choque cultural inverso. ¿Y ahora qué? ¿Significa esto que tienes que volver a tu vida de expatriado, donde te sentías más feliz y en paz? ¿O debes esforzarte por readaptarte a tu vida en el país de origen?
Las respuestas a estas preguntas dependen de tu situación específica. En algunos casos, puede que al final te des cuenta de que la vida que has experimentado en otro país es la que prefieres y, finalmente, regreses. Sin embargo, en muchas situaciones, las personas pueden tener razones sólidas para querer rehacer su vida en casa: familia, trabajo, amigos, beneficios económicos y de seguridad social... y mucho más. ¿Cómo hacerlo?
La mayoría de los expatriados coinciden en que lo más eficaz es dar pequeños pasos prácticos para adaptarte a la vida en casa. Estos pasos pueden adoptar distintas formas.
Inscríbete en un curso de repaso de idiomas
Si has pasado mucho tiempo en el extranjero y tienes problemas para transmitir eficazmente tus ideas en tu lengua materna, un breve curso de actualización lingüística puede ser un buen punto de partida. Además de recuperar la fluidez en tu lengua materna, dispondrás de tiempo extra para readaptarte y, posiblemente, hacer nuevas amistades.
Lee noticias y libros locales en tu lengua materna
Pocas cosas absorben tanto la cultura de un lugar como la palabra escrita. Empieza a leer periódicos, libros y revistas en tu lengua materna, mantente al día de la actualidad y amplía tu vocabulario. Esto puede ayudarte a "sentir" más rápidamente tu lugar de origen y proporcionarte fáciles temas de conversación con colegas, amigos y familiares.
Ve la tele y películas
Para "acostumbrarte" de nuevo al sonido y al ritmo de tu lengua materna, puedes ver la televisión y películas. Esto también te ayudará a mejorar la comprensión cultural de tu país de origen a la vez que te mantiene entretenido y distraído de los retos de este periodo de transición.
Entabla conversaciones
El choque cultural inverso suele conducir al aislamiento autoinducido. Una forma de combatirlo es entablar conversaciones con la gente de tu país. Convierte en rutina hablar con alguien todos los días e intenta conocer cómo es la vida en tu país a través de las experiencias personales de tus interlocutores.
Escribe tus pensamientos
Lleva un diario o abre un blog en tu lengua materna. Escribir con regularidad no solo puede ayudarte a recuperar la fluidez lingüística más rápidamente, sino que también puede servirte como hoja de ruta de los pensamientos y sentimientos que has tenido desde tu regreso. Esto puede resultar muy útil a la hora de tomar la decisión de mudarte o quedarte.
Participa en un programa de intercambio de idiomas o en un taller cultural
Ayúdate a ti mismo ayudando a los demás. Mientras intentas readaptarte a tu vida en casa, algunos expatriados son recién llegados a tu país y pueden sentirse tan perdidos e inseguros como tú cuando te fuiste de casa. Ayudarles en su nueva vida en un lugar que tú llamas hogar puede acercarte también a sentirte realmente como en casa.
Busca apoyo en la comunidad local
Al experimentar un choque cultural inverso, tu primer instinto puede ser huir de las interacciones sociales, cerrarte a la familia y los amigos y quedarte solo con tus pensamientos. Pero puede que te sientas mejor si te rodeas de personas que tienen en cuenta tus intereses. Ya sean amigos, familiares o comunidades de apoyo profesional, la readaptación a tu nueva "vieja" vida suele ser mejor en buena compañía.
Resumiendo
Mientras que la mayoría de nosotros esperamos que una mudanza al extranjero sea una experiencia transformadora, la mudanza de vuelta rara vez se ve como un reto potencial. Pero puede serlo, y es mejor estar preparado. Esfuérzate por volver a casa tanto como lo hiciste en el extranjero: investiga, perfecciona el idioma, entra en contacto con la comunidad local y prepárate para crecer personalmente.