¿El Año Nuevo es como cualquier otro día cuando se vive en el extranjero?

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Publicado el 2022-12-20 a las 08:59 por Ameerah Arjanee
Al igual que otras festividades, el Año Nuevo varía según las culturas. En algunos países se celebra con pompa y esplendor, mientras que en otros las celebraciones se atenúan o se centran en las compras. El Hemisferio Norte está en invierno y el Hemisferio Sur en verano el 31 de diciembre, lo que también crea experiencias muy diferentes. Muchos países no occidentales utilizan un calendario distinto al gregoriano y tienen otro "Año Nuevo" culturalmente mucho más significativo que el 31 de diciembre.

Los países del hemisferio sur, como Australia y Brasil, celebran el Año Nuevo en pleno verano.

Los expatriados del Hemisferio Norte -Europa, Asia, EE.UU., Canadá, etc.- están acostumbrados a la idea pintoresca de una Navidad y un Año Nuevo nevados. - pueden estar acostumbrados a la pintoresca idea de una Navidad y un Año Nuevo nevados: chocolate caliente con malvaviscos, bonitos jerséis y gorros nuevos, chimeneas y hogueras. Sin embargo, si se convierten en expatriados en cualquier país del Hemisferio Sur, descubrirán que el Año Nuevo es en pleno verano. 

En el Hemisferio Sur, muchos de los símbolos tradicionales de las fiestas, como los Papás Noel de los centros comerciales y los pinos, seguirán ahí, pero adaptados al calor. El centro comercial tendrá aire acondicionado para evitar que Papá Noel se asfixie con sus gruesas ropas de lana, y los pinos podrían ser falsos ante la ausencia de estos árboles en el ecosistema. Las revistas gastronómicas australianas, como Taste y Delicious, ofrecen recetas navideñas frías para disfrutar con temperaturas de entre 25 y 29 °C: jamón y pavo fríos, barbacoas cocinadas al aire libre o incluso en la playa, refrescos de tequila y spritzes, y ensaladas variadas. 

La playa es uno de los principales lugares de celebración del Año Nuevo en el hemisferio sur. Muchos brasileños se agolpan en la playa, sobre todo en Copacabana, en Río de Janeiro, vestidos de blanco, un color que es excelente para el calor y simboliza la buena suerte porque honra a la diosa afrobrasileña del mar Lemanjã. Muchos restaurantes y bares a pie de playa ofrecen comidas de Año Nuevo. Y cuando el reloj marca la medianoche, los brasileños se lanzan al cálido mar vestidos de blanco de Lemanjã para atraer aún más la buena suerte. 

Países como China y las naciones del CCG tienen otros Años Nuevos culturales

Muchos países no occidentales utilizan un segundo calendario local además del gregoriano, que se usa principalmente con fines cívicos. Los calendarios chino y coreano son lunisolares híbridos, mientras que el calendario islámico de los países de mayoría musulmana es puramente lunar. Aunque en estos países se celebran algunas festividades de Año Nuevo el 31 de diciembre y el 1 de enero, éstas pueden ser bastante nuevas, estar impulsadas principalmente por la occidentalización o por las empresas (que quieren aprovechar la temporada de compras navideñas), y no ser muy significativas desde el punto de vista cultural para las familias. 

Por ejemplo, en China, el Año Nuevo Chino/Festival de Primavera, cuya fecha oscila entre finales de enero y marzo, es mucho más significativo culturalmente que el Año Nuevo Gregoriano. Es el momento en que los jóvenes chinos adultos viajan a sus ciudades o pueblos de origen para celebrarlo con sus padres, abuelos y toda la familia. Finales de diciembre es más una fiesta de compras centrada en los centros comerciales. 

De hecho, en China, la mayoría de los trabajadores ni siquiera tienen vacaciones en diciembre: sus días de descanso más largos se conceden con motivo de la Fiesta de la Primavera. El 31 de diciembre y el 1 de enero son festivos, pero los demás días de ese periodo son laborables normales. Shanghai es la ciudad china con más influencias occidentales, por lo que tiene celebraciones del 31 de diciembre más espectaculares que la mayoría de las demás ciudades del país, incluso más que Pekín. 

El Año Nuevo Lunar coreano, Seollal, también suele celebrarse a finales de enero, febrero o marzo. Aunque el 31 de diciembre se celebra con fuegos artificiales y fiestas, e incluso con el volteo de un campanario que data del siglo XIII en el centro de Seúl (el Campanario Bosingak), es el Seollal el más importante para las celebraciones familiares. Al igual que la Fiesta de la Primavera china, en Seollal los coreanos regresan a sus ciudades natales, visitan a sus familiares (especialmente a sus abuelos) y comparten comidas tradicionales como el "ddeokguk" (sopa de pastel de arroz).

¿Y en los países del Golfo? El calendario islámico se utiliza en todos los países del Golfo, además de en otros países islámicos como Irán o los norteafricanos. El Año Nuevo de este calendario, el "Raʼs as-Sanah al-Hijrīyah", cae cada año en una fecha diferente del calendario gregoriano: en 2022, fue el 29 de julio; en 2018, el 10 de septiembre, etc. En 2023, será el 18 de julio. Aunque el Año Nuevo gregoriano no tiene el profundo significado cultural o religioso del Año Nuevo islámico, o ni siquiera es festivo, hay muchos lugares donde celebrarlo debido a la gran población de expatriados en los países del Golfo. 

En los EAU, donde el 90% de los residentes son expatriados, es festivo y se organizan majestuosos espectáculos pirotécnicos, sobre todo en el Burj Khalifa y Global Village. Hay muchos lugares de fiesta, sobre todo en la isla de Yas. La Nochevieja también es festiva en Omán. En Kuwait, sólo el 1 de enero (pero no el 31 de diciembre) es festivo. En Qatar, el 1 de enero es festivo, pero no completo. En Arabia Saudí no hay ningún día festivo en este periodo. Los expatriados en Arabia Saudí pueden planear una cena especial o ver fuegos artificiales en grandes ciudades como Riad y Yeda, pero no habrá fiestas deslumbrantes ni mucha música. En Qatar, las celebraciones también suelen limitarse a hoteles, complejos turísticos y restaurantes.

Las tradiciones específicas de Año Nuevo varían incluso entre países europeos

Las fiestas de Año Nuevo también pueden variar entre los países europeos, por supuesto, no sólo entre los países del Hemisferio Sur. En el foro de Expat.com, expatriados en Europa se expresaron sobre sus diferentes experiencias de las celebraciones de Año Nuevo mientras vivían en el extranjero. 

Un expatriado, Guest5891, ha vivido en varios países de Europa del Este y del Báltico y dice que, según su experiencia, las celebraciones de Año Nuevo son un "acontecimiento mucho mayor" en Estonia que en Finlandia. Dice que, aunque en Finlandia se tiran fuegos artificiales a medianoche, la mayoría de la gente se va a dormir a las 2 de la madrugada en vez de quedarse despierta toda la noche. Según su experiencia, la comida de Año Nuevo en Estonia es también más variada y abundante, mientras que en Finlandia es más básica, como la ensalada de patatas.

Este expatriado en los foros también destaca que en Rusia, los niños reciben sus regalos el 31 de diciembre en lugar de por Navidad. También escriben a Ded Moroz, una figura similar a Papá Noel, para Año Nuevo y montan un árbol de Año Nuevo, el Novogodnaya Yolka. Esto se debe a que, al igual que China y los países del Golfo, Rusia tiene un segundo calendario: el Calendario Juliano de la Iglesia Ortodoxa, cuya Navidad es el 7 de enero y el Año Nuevo religioso el 14 de enero. De ahí que principios de enero sea para los rusos una época festiva más relevante desde el punto de vista cultural y religioso, aunque el 31 de diciembre haya celebraciones, incluidos conciertos y fuegos artificiales en la Plaza Roja.

En España, el principal acontecimiento de entrega de regalos se celebra el día de Año Nuevo en lugar del día de Navidad. El Día de Reyes se celebra el 6 de enero con la apertura de regalos y fastuosos desfiles callejeros de los Reyes Magos. En América Central y del Sur se celebra el mismo día, el 5 o el 6 de enero. Otra interesante tradición de Año Nuevo en España es comer 12 uvas el 31 de diciembre, una por cada campanada a medianoche.