Holanda frena la entrada de trabajadores extranjeros y refugiados en 2022

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Publicado el 2022-10-11 a las 05:46 por Ameerah Arjanee
La población de los Países Bajos creció en más de 250.000 personas en 2021, y esta tendencia podría persistir debido al aumento del número de inmigrantes extracomunitarios. Sin embargo, el gobierno holandés pretende frenar temporalmente la inmigración, especialmente entre los solicitantes de asilo, porque ejerce una presión insostenible sobre este pequeño país con viviendas limitadas.

La inmigración extracomunitaria se ha mantenido alta a pesar de la pandemia

A pesar de los cierres de fronteras y otras interrupciones causadas por Covid-19, el número de inmigrantes de fuera del Espacio Económico Europeo (EEE) se ha mantenido alto desde 2019. Según las cifras publicadas por Estadísticas de los Países Bajos (CBS), alrededor de 270.000 inmigrantes se trasladaron al país en 2019, 220.000 en 2020 y 252.000 en 2021. La pandemia hizo que las cifras de inmigración bajaran en menos de 100 mil, y en cualquier caso, estas cifras están recuperando rápidamente los niveles anteriores a la pandemia. 

Un porcentaje considerable de estos recién llegados son inmigrantes altamente cualificados procedentes de India, China, Turquía y Estados Unidos. Dentro de la UE, muchos proceden de Polonia. Se les llama "emigrantes del conocimiento", lo que significa que han obtenido un visado de trabajo por sus conocimientos especializados que pueden contribuir a la economía holandesa. Por ejemplo, la mayoría de los nuevos emigrantes de la India son profesionales de la informática. Dada su formación profesional, suelen ganar mucho cuando se instalan en los Países Bajos. Entre 2013 y 2017, el ingreso medio de los neerlandeses fue de 34.000 euros, mientras que el de los migrantes del conocimiento indios fue de 40.300 euros.

La categoría de "emigrante del conocimiento" está sujeta a algunas condiciones. En primer lugar, estos migrantes deben ser patrocinados por un empleador holandés reconocido por el Servicio de Inmigración y Naturalización (IND). Deben recibir un salario acorde con el mercado, cuyo importe exacto cambia cada año. En 2022, es de 4.840 euros al mes para los mayores de 30 años y de 3.549 euros para los menores de 30 años. La mayoría de los inmigrantes del conocimiento son bastante jóvenes y, según el diario holandés Trouw, aproximadamente tres cuartas partes son hombres. Esto podría explicarse por el hecho de que el sector STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), en el que se encuadran muchas de las competencias más demandadas, está dominado por los hombres.

Un número creciente de estos inmigrantes altamente cualificados ha solicitado también la ciudadanía. En 2020, el IND recibió 43.660 solicitudes de ciudadanía, y esta cifra aumentó considerablemente hasta 59.680 en 2021. Muchas son de inmigrantes indios, así como de sirios y eritreos (nota: muchos sirios en los Países Bajos son refugiados en lugar de inmigrantes económicos). Los visados de reagrupación familiar aumentaron de la mano de los visados de conocimiento y la ciudadanía. De hecho, según las estadísticas del CBS, la reagrupación familiar es la segunda categoría principal de visado solicitada por los indios.

Las universidades holandesas se enfrentan al aumento de estudiantes internacionales 

No sólo los visados de trabajo han experimentado un aumento en el país: los visados de estudiante también están en alza. Nuffic, una organización holandesa sin ánimo de lucro para la cooperación internacional en materia de educación, ha informado de que la matrícula internacional para el curso 2021-2022 aumentó un 12%, alcanzando un récord de 115.0678 nuevos estudiantes internacionales. El crecimiento fue mayor en las matrículas internacionales de posgrado que en las de grado. 

La gran mayoría, el 72%, de estos estudiantes procede de la Unión Europea (UE) y del Espacio Económico Europeo (EEE), especialmente de Alemania, Italia, Rumanía, Bélgica, España y Francia. El número de matrículas de estudiantes británicos ha disminuido drásticamente tras el Brexit, probablemente porque los estudiantes británicos ya no pueden beneficiarse de las tasas de matrícula más bajas de la UE. Sin embargo, la matrícula de estudiantes chinos, indios y estadounidenses también ha aumentado considerablemente. Por ejemplo, en 2021 hubo más estudiantes nuevos de China (5.300) que de Francia (4.294) o España (4.687).

A principios de 2022, la Asociación de Universidades de los Países Bajos (VSNU) dio la voz de alarma por el exceso de nuevos estudiantes. La VSNU afirma que un alumnado excesivamente numeroso agravará los problemas de financiación, hará trabajar en exceso a su personal académico y administrativo y reducirá la calidad de la enseñanza. El presidente de la asociación ha hecho un llamamiento al gobierno para que limite el número de plazas y de visados de estudiante concedidos a los alumnos internacionales, especialmente para los programas impartidos en inglés y para los candidatos de fuera del Espacio Económico Europeo. 

El Ministro de Educación, Robert Dijkgraaf, ha respondido que entiende la preocupación de las universidades, pero que aún no ha tomado ninguna medida concreta. Subraya que no es realista tomar medidas antes de 2023-2024. Mientras tanto, la Universidad de Ámsterdam (UvA) ya ha actuado de forma independiente limitando el número de estudiantes internacionales en dos programas: psicología y ciencias políticas. 

Muchos estudiantes internacionales deciden vivir y trabajar en los Países Bajos después de graduarse. En una encuesta realizada por Nuffic a finales de 2021, casi el 60% de los encuestados dijo que probablemente buscaría trabajo en el país tras obtener su título. La cifra era mayor para los estudiantes de fuera del EEE que para los europeos. Las estadísticas de los Países Bajos muestran que, por término medio, la mitad de los estudiantes internacionales siguen en el país un año después de graduarse, y una cuarta parte sigue allí cinco años después. Ese sector de estudiantes pasa a formar parte de los inmigrantes altamente cualificados de la economía.

La falta de alojamiento para refugiados y estudiantes

Aunque tenga una economía avanzada y muchas universidades, Holanda sigue siendo un país muy pequeño. Sólo tiene unos 42.000 km², es decir, es trece veces más pequeño que Francia. Es muy difícil para el país encontrar espacio para albergar a una población creciente.

Sorprendentemente, el país se enfrenta a la amenaza de la superpoblación cuando su crecimiento demográfico natural es negativo. Un crecimiento demográfico negativo significa que hay más muertes al año que nacimientos: en el primer trimestre de 2022, murieron 43.100 personas, pero sólo nacieron 40.300. Sin embargo, la constante afluencia de inmigrantes mantiene la población alta. Impulsada por la inmigración, la población neta del país ha crecido en un millón de personas en la última década.

Esta afluencia migratoria incluye a los ya mencionados inmigrantes económicos altamente cualificados, pero también a muchos refugiados. De hecho, actualmente hay cerca de 80.000 refugiados ucranianos en los Países Bajos, todos ellos, por supuesto, llegados en 2022. También hay muchos procedentes de Afganistán, especialmente desde que los talibanes retomaron el control del país, y de Siria. Los datos de Eurostat muestran que hay un retraso de 30.000 solicitudes de asilo pendientes en las oficinas de inmigración holandesas. 

Las autoridades holandesas tienen dificultades para encontrar un alojamiento adecuado para todos estos refugiados. El Ministerio de Justicia y Seguridad ha revelado que casi 60.000 refugiados (de varios países) siguen viviendo en albergues o campamentos, aunque a muchos ya se les debería haber proporcionado legalmente una vivienda adecuada. Algunos cruceros, hoteles e iglesias se han convertido incluso en refugios. Muchos campos de refugiados se han convertido en lugares abarrotados e insalubres, denuncian las organizaciones de derechos humanos. Muchos menores no acompañados están atrapados allí en el limbo, y en septiembre, un bebé murió en circunstancias poco claras en el centro de refugiados de Ter Apel.

El gobierno ha declarado que actualmente "trabaja para encontrar 20.000 plazas de alojamiento adicionales para los solicitantes de asilo con permiso de residencia". Sin embargo, al mismo tiempo, está intentando reducir el número de llegadas de refugiados al país. Se ha decidido suspender la reagrupación familiar de los refugiados con permiso de residencia hasta que encuentren una vivienda adecuada. Si al cabo de 15 meses siguen sin tener un lugar donde alojarse, sus familias en el extranjero podrán obtener visados independientemente del alojamiento. Sin embargo, la suspensión de la reagrupación familiar corre el riesgo de infringir las normas de derechos humanos de la Unión Europea.

La vivienda para estudiantes también se enfrenta a una escasez. El gobierno ha anunciado un Plan de Acción Nacional de Viviendas para Estudiantes 2022-2030 para construir 60.000 viviendas asequibles para estudiantes a finales de la década. Se construirán en colaboración con las universidades, las asociaciones de vivienda existentes y los inversores privados. Incluirá 37.500 viviendas flexibles -casas que pueden adaptarse a diferentes funciones- construidas en la primera fase de 2022 a 2024.

Aunque el gobierno holandés aún no ha tratado de limitar la matriculación de estudiantes internacionales ni la migración basada en el conocimiento y las aptitudes, es posible que pronto aumente los criterios de elegibilidad para esta última. El Ministro de Vivienda y Ordenación del Territorio, Hugo de Jonge, ha dicho que una inmigración elevada puede "perturbar la sociedad" y que tienen que analizar detenidamente qué sectores tienen escasez de trabajadores y dónde tienen que ser más selectivos.