Prepararse para trasladarse al extranjero con niños
El plan de mudarse al extranjero concierne a toda la familia, incluso a los niños pequeños. Los niños deben sentirse implicados en tus planes y, sobre todo, deben sentir que lo llevas todo bien. Recuerda que ellos perciben y absorben tus emociones. Si usted está estresado, ansioso o inseguro de sí mismo, sus hijos podrían temer este traslado. Pero tampoco se trata de reprimir tus emociones. Para estar lo mejor preparado posible, háblalo todo y no dudes en pedir ayuda a un coach especializado en la vida de los expatriados. Establece un marco para tu traslado al extranjero para tomar las decisiones correctas.
¿Qué edad tienen tus hijos?
Los bebés no tendrán problemas de adaptación. Es más, aprenderán el idioma de tu país de expatriación de forma muy natural. Pero no porque los niños sean pequeños hay que dejar de explicarles nada, sino todo lo contrario. Háblales de tus planes, enséñales fotos del nuevo país y habla con ellos algunas palabras del idioma del país.
¿Cómo hacer que tus hijos participen?
Cuanto más mayor sea el niño, más tiene que participar activamente en tus planes. Los niños que han empezado el colegio ya habrán establecido vínculos con sus amigos (incluso los de la guardería cuentan). Separarse de sus amigos será una ruptura dolorosa, así que debes prepararlos lo mejor posible. Las cosas pueden complicarse más si tus hijos son adolescentes. También en este caso, es esencial que hables con ellos con la mayor antelación posible sobre tus planes. Involucra a tus hijos adolescentes en mayor medida (en la elección del instituto, el barrio en el que viviréis, las actividades extraescolares, etc.).
¿Qué grado de conocimiento tienen de otras culturas?
¿Son una familia de entusiastas de los viajes? ¿Habéis viajado alguna vez en familia al extranjero? ¿Estás abierto a otras culturas? ¿Hablas ya el idioma del país de acogida? Algunas familias tienen una mayor "visión multicultural" que otras. Esta amplitud de miras no nace necesariamente de muchos viajes internacionales; depende más bien de los ámbitos de interés de las personas: la música, la gastronomía, la literatura, los deportes, el uso y la práctica de lenguas extranjeras, etc. Las familias multiculturales también pueden estar más orientadas hacia otras culturas. Los niños inmersos en este tipo de entorno abierto y tolerante son más propensos a ver la expatriación de forma positiva.
¿Cómo surgió el plan de trasladarse al extranjero?
Esta es otra pregunta crucial que sitúa a tus hijos en el centro de tus planes. ¿Tú o tu pareja os trasladáis al extranjero con un contrato de expatriación? ¿O tienen la intención de emigrar? ¿Por qué este país en lugar de otro? ¿Hace tiempo que quieres vivir en el extranjero o este proyecto ha nacido recientemente? Habla con tus hijos de tus planes, sobre todo si se trata de tus viejos sueños. Porque, como tú, ellos también tienen sus propios sueños. No minimices sus sueños, ten una actitud abierta ante sus preguntas y desacuerdos. Haz que se sientan tranquilos y preparad juntos la gran mudanza.
Visados para los niños: ¿durante cuánto tiempo puede apadrinarlos?
Para acompañarte al extranjero, tus hijos necesitarán un visado de dependencia. Los países limitan la validez de este visado en función de la edad de los hijos (generalmente hasta la mayoría de edad). A este respecto, los Emiratos Árabes Unidos (EAU) ofrecen algunas ventajas más a los expatriados.
Los nuevos visados de los EAU, algunos de los cuales entraron en vigor en septiembre, permiten a los padres expatriados apadrinar a sus hijos durante un periodo más largo, hasta que tengan 25 años en lugar de 18. Los titulares de un visado dorado disfrutan de aún más ventajas. Para ellos, no hay restricciones. Pueden apadrinar a su cónyuge y a sus hijos sin límite de edad para estos últimos. Si los expatriados tienen un visado verde, pueden patrocinar a sus hijos hasta los 25 años y, sólo en el caso de las hijas solteras, por tiempo indefinido.
Según la legislación estadounidense, el visado de dependencia para los hijos sólo afecta a los menores de 21 años. Pero dados los largos tiempos de espera, es posible que un niño cumpla 21 años en el transcurso del procedimiento de solicitud de visado. La Ley de Protección del Estatuto del Niño permite que algunas personas que tienen 21 años al final del procedimiento de solicitud sigan beneficiándose de un visado "para niños". Tanto los hijos como los padres tienen que presentarse a la entrevista para el visado. Sólo los niños menores de 14 años están exentos de esta entrevista.
En Canadá, los hijos menores de 22 años pueden obtener un visado de dependencia. Los padres pueden apadrinar a los hijos mayores de 22 años con dos condiciones específicas y agravantes: el joven no puede ser económicamente independiente debido a una discapacidad física o mental, y ya dependía de sus padres antes de cumplir los 22 años.
El Reino Unido sólo expide un visado de dependencia si el hijo es menor de 18 años cuando los padres presentan su solicitud.
La educación de tus hijos en el extranjero
Existen múltiples soluciones para educar a su hijo mientras vive en el extranjero.
Colegios internacionales
Colegios franceses, españoles, británicos, etc. Si lo deseas, puedes optar por un colegio internacional. Estas escuelas no están reservadas a los niños expatriados, sino que también asisten niños locales. La ventaja es que estas escuelas pueden ofrecer a su hijo el mismo ritmo académico al que estaba acostumbrado en su país. Es una forma de reconectar al niño con un mundo con el que ya está familiarizado. Pero hay que tener cuidado con el coste económico. Si algunas de estas escuelas están gestionadas por las autoridades gubernamentales de su país de expatriación, la mayoría son totalmente privadas. Las tasas de matrícula pueden variar considerablemente de un país a otro. Tu hijo también podría obtener eventualmente una beca o ayuda financiera en función de sus necesidades.
Colegios locales
No es de extrañar que la mayoría de los niños locales vayan a escuelas locales. La ventaja de matricular a sus hijos en una escuela local es que se relacionarán directamente con su nueva vida en el país de acogida. Aprenderán a hablar y practicar el idioma local con mucha más facilidad. Se adaptarán culturalmente mucho más rápido. Podrán ajustarse al estilo de vida, a las normas y costumbres de los lugareños, y a todas esas cosas cotidianas que sólo podemos adquirir mediante una completa inmersión cultural.
Aprendizaje a distancia
¿Te vas a ir de viaje como nómada al extranjero? Puedes optar por cursos a distancia. Tus hijos seguirán el mismo sistema académico que en su país de origen. Francia, por ejemplo, permite a los niños estudiar a distancia a través del CNED, el Centro Nacional de Educación a Distancia, gestionado por el Ministerio de Educación Nacional. Los expatriados franceses se benefician de unos 150 euros por un alumno de secundaria. Pero la elección de cursos en línea o a distancia requiere un mayor esfuerzo por su parte como padre. Tendrás que comprobar si tus hijos siguen realmente sus cursos. A veces, incluso tendrás que actuar como profesor de educación en casa. Debes asegurarte de que tus hijos tengan actividades extraescolares fuera de casa, preferiblemente en grupo, para animarles a socializar.
Más consejos para mudarse al extranjero con niños
Cómo dar la noticia
Dales la noticia a tus hijos lo antes posible, sobre todo si mudarte al extranjero es un viejo sueño tuyo. Olvídate de la reunión familiar de urgencia en torno a la mesa de la cena que podría desencadenar; sólo te estresará. Olvídate también del factor sorpresa. Puede que tus hijos no compartan tu entusiasmo (sobre todo si son mayores), y los entendemos. Si no participan en los planes, les costará aún más imaginarse en el extranjero.
Puedes optar por anunciar la noticia progresivamente. Habla cuanto antes de tus planes y sigue refiriéndote a ellos con un enfoque lúdico: juegos, vídeos sobre el país extranjero, libros, chats de videollamada con familias expatriadas, etc. Implique a sus hijos en la elección del colegio, del apartamento, de las actividades futuras, etc. Aprended juntos el idioma del país. De este modo, tus hijos se sentirán capacitados y valorados.
Preparar juntos la mudanza
Involucra a los demás miembros de tu familia en los planes de mudanza al extranjero, incluso a los que se queden en casa.
Si eres padre o madre de adolescentes, deberías dedicar aún más tiempo a hablar con ellos. Por ejemplo, es posible que tus hijos adolescentes estén muy involucrados en un club de arte o de deportes, o que les guste mucho su colegio actual. Si crees que no quieren seguirte al extranjero, y si tienes familiares dispuestos a acogerlos mientras no estás aquí, considera esa opción.
Los sentimientos de los niños más pequeños (es decir, los de la escuela primaria) también son importantes. Es la edad en la que los niños aprenden a vivir en sociedad. No des por sentado que tu hijo va a aceptar siempre tus decisiones. Recuerda que son individuos distintos y que tus decisiones pueden molestarles. Ten en cuenta sus opiniones, pide a amigos y familiares de confianza que hablen con ellos y haz que el niño se sienta partícipe de los planes.
También debes tener en cuenta la personalidad de tus hijos. A veces pasamos por alto sus sentimientos o pensamos que son copias exactas de nosotros. ¿Son curiosos, juguetones, tranquilos, tímidos, introvertidos o extrovertidos? Adáptate a ellos y gánate su confianza.
Hacer un viaje de prueba
Lo ideal, y sobre todo si nunca has viajado a tu futuro país de expatriación, es que te plantees hacer un pequeño viaje de prueba de unas semanas allí.
