Con el fin de impulsar su industria turística y reactivar así su economía después de la crisis de COVID-19, Indonesia está trabajando actualmente en una nueva estrategia para atraer a los llamados nómadas digitales a Bali, así lo anunciaba el Ministerio de Asuntos Marítimos de Indonesia la semana pasada. En esta misma línea, Estonia acaba de poner en marcha un visado para nómadas digitales, que les permite trabajar a distancia y durante un año, ya sea por cuenta ajena o propia. Si es cierto que la crisis económica que siguió a la pandemia del coronavirus está teniendo un impacto considerable en el empleo a nivel mundial, incluyendo los trabajos a distancia ¿cómo va a evolucionar la situación ahora que muchos países están empezando a reabrir sus fronteras a los extranjeros?