Atención

No me gusta ni me ha gustado nunca generalizar o juzgar a todos por uno, sin embargo les comparto la experiencia que tuve con un señor venezolano. Su nombre es [Mensaje moderado]. Hace unos meses llegó pidiendo ayuda al hotel donde trabajo, acababa de llegar del aeropuerto y necesitaba un lugar para quedarse y no tenía mucho dinero. Yo comparto un apartamento con otros extranjeros y en ese momento mi casa estaba llena. Sin embargo, se desocupaba una habitación un mes después. Sin pensarlo, llame a mi novio y le dije que me quedaba en su casa un mes, y le alquilé la habitación al señor por un precio extremadamente barato, lo que significaba que yo iba a tener que pagar parte de mi renta de ese mes aunque no viviera en el apartamento, pero quise ayudarlo porque mi padre vive en Venezuela hace más de 20 años y mis hermanos menores son venezolanos. El fin de la historia no es tan placentero como fue para él encontrar un lugar, casi de lujo, con todas las comodidades, el primer día de haber llegado aquí, y yo soy testigo, de que si bien es cierto que trabajaba duro en construcción, realmente nunca se vio en precariedades de alojamiento. Al señor le tocaba pagarme la renta correspondiente al mes pasado y cuando le cobré, ya dos días tarde, me aseguró que me pagaba al día siguiente, y en la madrugada de esa noche recogió sus cosas y se fue sin pagar, dejándome encharcada en unos líos, al no tener en mis planes calculado gastar la cantidad que él no pudo pagar. Se llama [Mensaje moderado]. YO YA NO LE VUELVO A RENTAR A VENEZOLANOS lamentablemente. Gracias a este señor, ahora me lo pensaré dos veces antes de ayudar a alguien.