El nuevo marco jurídico de la inmigración en Portugal
El 17 de julio de 2021, los Estados miembros de la CPLP, Comunidade dos Países de Língua Portuguesa, se reunieron en Luanda (capital de Angola) y firmaron un acuerdo sobre movilidad migratoria. El 21 de julio, el Partido Socialista Portugués, el Partido Comunista Portugués, el Bloque de Izquierda y Libre (partido ecosocialista portugués) votaron a favor de la reforma. En el otro lado, partidos como el Partido Socialdemócrata, Iniciativa Liberal, PAN (Personas, Animales, Naturaleza) se abstuvieron. Chega, un partido de extrema derecha, no asistió a la votación. La reforma fue aprobada, y el presidente prometió su rápida aplicación. Pero, ¿cuáles son las disposiciones de esta nueva ley de inmigración?
Un procedimiento de visado diferente para los nacionales de la CPLP
El primer gran cambio del nuevo procedimiento de visado se refiere a la mayor importancia concedida a la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa. A partir de ahora, los visados temporales y de residencia para los miembros de la CPLP podrán expedirse sin consultar previamente a la Oficina de Extranjeros y Fronteras (SEF).
Por defecto, los no residentes en Schengen en Portugal deben registrarse primero en la SEF antes de entrar en el país. Esto se aplica normalmente a los solicitantes de los Estados miembros de la CPLP que no pertenecen al espacio Schengen. De hecho, entre los Estados fundadores de la Comunidad CPLP (en 1996) se encuentran Angola, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Mozambique, Brasil y Santo Tomé y Príncipe. Timor Oriental se unió a la Comunidad en 2022 y Guinea Ecuatorial en 2014.
Con la nueva ley, los ciudadanos de estos Estados ya no necesitarán el dictamen de la Oficina de Extranjería y Fronteras para sus solicitudes de visado. Pero esta adaptación no resta competencias al SEF. Sólo se trata de hacer cumplir un punto del Acuerdo de Luanda.
¿Reparar los errores del pasado?
En su discurso del 4 de agosto, el presidente portugués hizo hincapié en: "Poner en marcha el mecanismo lo antes posible, [...] una idea compartida por Cabo Verde y Portugal [...] porque esto representa el reconocimiento de un mérito pasado que debemos a los caboverdianos en Portugal [...]".
Al igual que Cabo Verde, la mayoría de los Estados miembros de la CPLP son antiguas colonias portuguesas. Todavía arrastran las cicatrices históricas de aquellos tiempos y se mostraban escépticos ante la voluntad de Portugal de resarcirse, hasta la promulgación de la reforma. Por eso, el Presidente Marcelo Rebelo de Sousa, que quiere ampliar la influencia de la CPLP, insiste en calificarla de "minirrevolución" que creará nuevos intercambios entre los países.
Más que una comunidad de jefes de Estado, quiere que la CPLP se convierta en una "comunidad construida por sus pueblos, que a veces están presentes en Portugal desde hace mucho tiempo, pero de forma ilegal".
Regularizar la mano de obra extranjera
El otro cambio de la ley se refiere a la política de inmigración ilegal. Con esta reforma, el gobierno portugués espera favorecer la integración de los extranjeros ya presentes en el territorio e involucrados en la comunidad local (hablan portugués y tienen un trabajo).
Dado que Portugal se está convirtiendo poco a poco en un nuevo polo migratorio para decenas de miles de inmigrantes, incluidos los indocumentados, la nueva legislación está pensada para luchar contra la inmigración ilegal al tiempo que se aprovecha una mano de obra cualificada. Además, mientras las cosas se han acelerado desde la crisis siria de 2015, el número de inmigrantes en Portugal se disparó un 70%, entre 2015 y 2020. La situación de Portugal pasó de ser una tierra de emigración a una tierra de inmigración, e incluso un "hub" migratorio como el Reino Unido, Francia o Alemania. Sin embargo, al mismo tiempo, el país ha ido perdiendo a sus nacionales, que prefieren trasladarse a otros lugares de Europa para trabajar. Este es el efecto de la ciudadanía europea y del Acuerdo de Schengen, que permite a cualquier ciudadano de un Estado miembro viajar libremente dentro del espacio Schengen.
¿Un nuevo visado para los trabajadores?
Como respuesta a su escasez de mano de obra, el gobierno está estudiando la creación de un nuevo visado de duración determinada para los expatriados que deseen trabajar en Portugal. Ello permitiría facilitar los trámites para obtener un permiso temporal. El nuevo visado también será beneficioso para los miembros de la familia que tengan habilidades específicas, y también para los trabajadores a distancia. Además, aunque el Gobierno portugués ya ha puesto en marcha un visado temporal para autónomos y emprendedores, quiere estar al tanto de la revolución que se está produciendo en la organización del trabajo, tras el auge del trabajo a distancia y el nomadismo digital. Por ello, este nuevo visado debería dirigirse más específicamente a los trabajadores a distancia.
¿Hay algún cambio para los expatriados en Portugal?
En principio, no debería haber ningún cambio para los expatriados legales en Portugal. Su estatus legal no se cuestiona, a diferencia de las personas que buscan trasladarse allí, legal o ilegalmente. Sin embargo, teniendo en cuenta que Portugal se enfrenta actualmente a la escasez de mano de obra, como muchos otros países, busca atraer el talento internacional. Por lo tanto, Portugal sigue siendo uno de los principales destinos para expatriados, especialmente para aquellos que buscan trabajar en el extranjero. El otro punto positivo es el fortalecimiento de las relaciones entre los Estados miembros de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa, que se considera una situación en la que todos ganan. Aun así, puede ser demasiado pronto para evaluar su éxito, ya que el propio Presidente de Sousa reconoce "algunas imprecisiones" en las disposiciones de la nueva ley.
